Ante la proximidad de un nuevo acto eleccionario, nuestro miembro pleno, la Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas de la República Argentina (ACIERA) ratificó su posición como entidad que representa a un sector significativo de la iglesia evangélica en el país.
Es importante destacar que valoran todo acto democrático. Solo se superará con más democracia las difíciles situaciones que atraviesa la Argentina. Por lo tanto, entienden que democracia no es sólo votar, sino también saber respetar el pluralismo y la diversidad.
En este sentido, les llena de esperanza que personas, con una fe evangélica, decidan dedicar sus vidas al servicio al prójimo, mediante la participación política. A ellos les animan a que ejerzan su sana vocación por el bienestar de los demás dejando lo mejor de sí con el mayor esfuerzo y entrega que dicha misión implica.
Al respecto, siempre han recomendado no mezclar o confundir las funciones pastorales con la vocación por la cosa pública, siendo cuidadosos con la grey y respetando en todo las libertades y elecciones individuales de los creyentes.
Por esta razón, sostienen con oraciones a cada uno que sirve en el marco de las diversas corrientes ideológicas. Ruegan a Dios para que ejerzan sus funciones con honestidad, idoneidad y compromiso inquebrantable con las verdades que emanan de la Palabra de Dios.
Es una realidad que las comunidades de fe contienen la más amplia diversidad de posiciones e ideologías políticas, algo que implica para ellos una gran riqueza, en tiempos de intolerancia al que piensa distinto.
Es por ello que ningún partido político puede representar a las iglesias evangélicas, más allá de los evangélicos que lo integren.
Si bien son miembros de las comunidades de fe, lo cierto es que no representan a la iglesia evangélica en su conjunto y tampoco podrían atribuirse tal representatividad.
Finalmente, animaron a los creyentes de las iglesias que ACIERA representa, a ejercer el deber cívico de concurrir a las urnas en las próximas elecciones, emitiendo un voto a conciencia y responsable, de acuerdo a los principios y pensamientos con los que cada uno se identifica.
En medio de realidades que les azotan desde hace años, como la pobreza agobiante, la ética banalizada y la confrontación como estrategia, oran a Dios para que en su misericordia bendiga la tierra y sean capaces de sembrar semillas de paz, justicia y verdad, para cosechar una nueva y gloriosa nación.
“Ora por todos los que están en autoridad, para que podamos tener una vida pacífica y tranquila, caracterizada por la devoción a Dios y la dignidad”.
1 Timoteo 2:2 NTV Consejo Directivo Nacional de ACIERA