Asunción, Paraguay (28 de Abril de 2019) — Con multitudinarias marchas y encuentros en distintas ciudades, Paraguay celebró hoy el Día Nacional de la Familia, instituido por Ley número 5.425. Organizaciones Pro Vida y Pro Familia, así como movimientos católicos y especialmente evangélicos de la mano de ASIEP (Asociación de Iglesias Evangélicas del Paraguay) enarbolaron mensajes de defensa de la célula fundamental de la sociedad, en un contexto de ataque foráneo a esta institución que es piedra angular de la República.
La marcha central se realizó a la mañana en la Avenida Costanera de Asunción y al acto asistió el presidente de la República Mario Abdo Benítez, así como otras autoridades nacionales. Donde autoridades evangélicas tuvieron parte en el programa.
Si bien es cierto que la familia paraguaya enfrenta dificultades derivadas no solo de ideologías que quieren imponer desde el exterior, sino que de una onda materialista que se cimienta sobre el placer y propósitos de vida muy vueltos hacia uno mismo, mayoritariamente las expresiones expuestas por mensajeros y oradores en los diversos actos, apuntaron a que nos estamos fortaleciendo sobre los valores irrenunciables de la familia encabezada por un hombre y una mujer.
Padres e hijos salieron a lugares públicos y compartieron juegos en distintos puntos del país e instaron a las autoridades nacionales a estar alertas ante la presión de grupos internacionales que expanden una agenda global que en Paraguay se ha logrado contener y repeler.
A propósito, las dos Cámaras del Congreso Nacional -la de Diputados y Senadores por mayoría de votos, se han declarado Pro Vida y Pro Familia, como un mensaje a los poderosos lobbies internacionales que frecuentemente los visitan con propuestas de legislaciones.
En lo que a la celebración de hoy respecta, las redes sociales se llenaron de gráficos y comentarios familiares, de testimonios y festejos encuadrando de ese modo un marco de fiesta que abarcó parte de la mañana y de la tarde.
Los cultos evangélicos primordialmente abordaron como tema central la familia, por constituir, no una creación cultural, sino una institución creada por Dios para darle un contexto de fortaleza en el amor y protección al desarrollo de la humanidad.